Lista de frases que ayudan a mantener la calma y la ecuanimidad

Hay una pauta: cuanto más ascendemos, más envidiosos y hostiles se vuelven a nuestro alrededor. Algunas de estas personas quieren deliberadamente hacernos perder los nervios comportándose de forma inapropiada, siendo abusivos y siendo groseros con nosotros.
¿Qué debemos hacer en una situación así? Se puede responder con grosería a la grosería. Pero eso no es una buena idea. Fíjate en los políticos y en los grandes empresarios: no lo hacen. En lugar de eso, simplemente se callan o cambian de tema, manteniendo la calma y la imperturbabilidad.
Esta estrategia, por cierto, también es buena para nuestros nervios, corazón y salud en general. Los gerontólogos contaron las estadísticas de los longevos y resultó que la mayoría de estas personas tenían un carácter tranquilo, eran capaces de controlar sus emociones y no derrochaban sus nervios.
Así que podemos concluir que la ecuanimidad y la resistencia en situaciones de estrés, la capacidad de controlarse es lo que cuida nuestro sistema nervioso y prolonga nuestra vida.
A continuación presentamos una lista de frases que ayudan a mantener la calma y la ecuanimidad en situaciones difíciles:
- Soy más fuerte que eso;
- La base de toda sabiduría es la calma y la paciencia;
- Tírame tierra, tírame piedras. ¡Estoy tranquilo porque soy un RÍO!
- Todo lo que sucede a mi alrededor es sólo un fondo, todos los eventos son neutrales;
- Esta persona no merece mi atención;
- Soy el hijo (hija) de Cristo. Y aguantó más que eso;
- Los defectos son los que nos hacen únicos. Yo acepto los míos. No intento «filtrar» mi naturaleza humana;
- Cuanto más pequeño es el perro, más fuerte y más ladra;
- El perro ladra y la caravana camina;
- Si no hay paz dentro de nosotros, es inútil buscarla fuera;
- La calma es más fuerte que las emociones. El silencio es más fuerte que los gritos;
- Sólo estoy respirando ira. Pero ahora exhalo y se va;
- No me tomo a pecho las palabras de la gente con una mente enferma;
- Todo se escapa con el tiempo. Dejo lo malo en el pasado y sonrío al futuro;
- Siempre hay tranquilidad en el corazón de un huracán;
- Enfadarse e irritarse no es más que castigarse por la estupidez de otro;
- La serenidad priva a mis enemigos de poder y autoridad sobre mí. Porque en este estado no hay miedo ni ira innecesaria, sólo la realidad, despejada de distorsiones y de la interferencia de los arrebatos emocionales;
- Las heridas infligidas por los propios pensamientos innecesarios se curan más tiempo que cualquier otra;
- Lo que podemos percibir con calma ya no nos controla;
- Nunca tendré que lamentar lo que logré callar.